lunes, 25 de septiembre de 2017

¿ME FORMO, NO ME FORMO? ESA ES LA CUESTIÓN.

Esa es la cuestión. A continuación comparto mis reflexiones sobre la formación formal, no formal e informal. ¿Cómo se forma el profesorado a lo largo de la vida? El profesorado, una vez que ha obtenido la correspondiente certificación para poder ser docente, va formándose a lo largo de su vida profesional participando en actividades formativas varias, tanto a nivel formal, no formal e informal. La formación permanente es un proceso educativo continuado, que se produce a lo largo de la vida, mediante la cual el docente va actualizando sus conocimientos, aptitudes y capacidades. ¿Cómo te formas tú? Mi formación se realiza en múltiples contextos de aprendizaje. Así puedo obtener certificaciones formales de universidades participando en cursos de experto universitario a distancia, considerándose como un aprendizaje formal que se lleva a cabo dentro de un proceso institucionalizado con su correspondiente certificación. Igualmente, puedo participar en cursos que organiza el Centro de Profesores de mi comunidad, asistiendo presencialmente a los mismos, éstos están estructurados, secuencializados y reglados con una duración determinada y correspondiente certificación. Dentro de esta modalidad también me formo partipando en los cursos de formación en centros. Finalmente, como parte de mi aprendizaje no formal a través de mis actividades cotidianas como formadora y ponente de cursos tanto presenciales como a distancia, voy adquiriendo conocimientos y perfeccionándome. En mi día a día, con el contacto y relación con algunos de mis compañeros docentes también voy incorporando cambios en mi práctica docente y voy perfeccionando mis competencias profesionales. ¿Cómo aprendes? Principalmente aprendo mucho participando en los cursos de formación online del Intef y en universidades que imparten cursos a distancia. Me gusta ser autodidacta, investigar, navegar por Internet, buscar información, recoger experiencias que considero como buenas prácticas. No ceso de aprender, a lo largo de mi vida profesional he ido mejorando mis capacidades docentes y actualizando mis conocimientos, especialmente en el ámbito de las nuevas tecnologías. El contenido de aprendizaje me ha de motivar, estimular, despertar las ganas de conocer y saber más. Procuro seguir webs que me ayudan a estar al día como Tiching o Procomun. Espacios que me ofrecen recursos educativos que me ayudan a estar al día además de poder compartir experiencias con otros compañeros através de las comunidades de aprendizaje como es Google plus. ¿Dónde aprendes? Principalmente aprendo en la red. Me encanta, me fascina, poder ser dueña de mi aprendizaje, cuando aprendo, dónde aprendo, en el momento que quiero y me va mejor. Aprendo de mis semejantes, ampliando mi red de aprendizaje, mi PLE; compartiendo ideas y proyectos y aprendiendo de experiencias de los demás. Mi entorno personal de aprendizaje se ha ido expandiendo cada vez más gracias a la formación participando en los cursos del INTEF. Me hacen sentir viva, estimulada, presente en mi profesión y conectada. ¿Con quién aprendes? ¿De quién aprendes? Aprendo interactuando con los demás. Gracias a los tutores de los cursos y los organizadores de los mismos puedo ampliar mis conocimientos. Me encanta que mi ruta sea flexible, adaptada a mis necesidades, desde la formación que me ofrece la red. Los tutores de los cursos online que realizo me ayudan a seguir mi propio ritmo de aprendizaje, al tiempo que establezco relaciones con otros participantes desde la organización de comunidades de aprendizaje. Las conexiones que puedo establecer tanto con los tutores como con los compañeros me facilitan ser autónoma, tomar decisiones y autorregular mi aprendizaje. ¿Cómo y dónde aprendes más? Realmente mi verdadero aprendizaje y más auténtico y real es participando en cursos de formación online que me permiten tener un papel muy activo y participativo. Mi implicación y compromiso es mucho mayor que asistiendo presencialmente a cursos en los que el profesorado que los imparte se dedica a ser un mero transmisor de conocimientos. ¿Qué recursos utilizas? Las Nuevas Tecnologías nos ofrecen una amplia variedad de recursos, herramientas o aplicaciones, éstas me permiten buscar, organizar, crear y compartir, ya sea comunicando o publicando, la información y el conocimiento. ¿Qué recomendarías a un docente que quiera formarse? Sin duda que actualice sus conocimientos en Nuevas Tecnologías, los entornos de aprendizaje que éstas nos ofrecen son infinitos además de presentar grandes ventajas tal y como hemos visto en esta unidad.
De acuerdo a mi opinión, principalmente el punto de reflexión sobre educación formal, no formal o informal nos dirige indiscutiblemente al debate s en el uso de las Nuevas Tecnologías en el aula, las cuales nos enseñan nuevas formas de relación y de trabajo en equipo además de, como hemos visto, una actualización activa de los contenidos objeto de aprendizaje. El problema principal que como docente detecto es la propia Administración Educativa junto con los pocos creyentes y defensores de que hemos de ir avanando en una pedagogía centrada en los usos tecnológicos. Destacar que el aprendizaje no sólo se adquiere en los espacios formales, también hay otras formas de aprender especialmente aquí y ahora donde no hay límites de espacio ni de tiempo gracias al uso de las NUEVAS TECNOLOGÏAS. Me pregunto por qué existen tantos docentes reacios a emplear el móvil en el aula, en tanto lo considero una herramienta con mucho potencial. El profesorado debe dejar el pasado y adentrarse en un futuro prometedor basado en una enseñanza más motivadora. Los docentes motivados en el uso de estas herramientas nos encontramos limitados por el contexto educativo, a veces el centro en el que trabajamos nos impide avanzar en la implementación de estas nuevas formas de enseñanza y de aprendizaje. Nos encontramos sin apoyo, sin recursos, ni espacios para poder dar rienda suelta a nuestros intereses y motivaciones relacionadas con este campo. Realmente, somos bichos raros? Por eso entiendo que hay que cambiar mentalidades y la formación continua a lo largo de la vida es el camino para lograrlo. La formación es fundamental, pero también lo es el apoyo mutuo entre docentes y el trabajo colaborativo. La presión de cumplir con los programas es otra importante limitación, es una gran contradicción compaginar las demandas de la Educación del Siglo XXI y nuestra interpretación del rol docente como transmisor. Lo estimulante es empezar el camino, e ir avanzando, estamos abiertos a nuevas ideas, y así lo demostramos con nuestra formación en el uso de las Nuevas Tecnologías en nuestro desarrollo profesional, no sólo como docentes sino también como investigadoras. No todo ha de caer en la voluntariedad del profesorado, el apoyo de los líderes de la administración y el equipo directivo del centro es fundamental ofreciendo las ayudas, tiempo, espacio, herramientas, materiales, para poder ir incorporando estos cambios en la enseñanza. Entiendo que hay que sacar al alumno de las aulas, fuera hay vida, ya sea virtual o real, salir del centro educativo e interactuar con otras realidades. Las posibilidades de la tecnología es infinita, nos traslada a otros mundos, realidades, espacios, es una forma de migración mental que nos acerca al aprendizaje más informal. La motivación del alumnado es básica, ya sabemos que no hay niños hiperactivos, sino aburridos, el profesor es el motor motivacional y para ello cuenta con nuevos recursos basados en tecnología educativa. En cuanto al riesgo de si despersonalizan las nuevas tecnologías, mi opinión es que, al contrario, la personalizan haciéndola más individualizada y generando un entorno de aprendizaje más lúdico y motivador. La motivación es fundamental tanto para el profesorado como para el alumnado. El verdadero reto es cambiar el rol docente, dar autoridad al alumno, lo cual deriva también en mayor autoestima, autoresponsabilidad, confianza, autonomía, etc. Competencias todas ellas relacionadas con aspectos socioemocionales y competencia emprendedora. Son las nuevas competencias a enseñar, nuevas herramientas, aprender a aprender, trabajar en equipo, respetando la diversidad como reto educativo. En este contexto, el rol del docente cambia, ya no es un puro transmisor, ahora nos cuestionamos si realmente el papel del profesor como transmisor de conocimientos tiene los días contados, entendiendo que es una guía, una ayuda, orientador y mediador de contenidos y herramientas de aprendizaje que ofrece al alumno en su proceso educativo. Es nuestro sueño, un mundo al alcance de todos. Quisiera finalizar esta reflexión comentando que para mí la formación es fundamental, me da vida, me activa y me estimula, y más si la realizo desde la red con profesionales y tutores que me guían y me orientan en mi aprendizaje, ayudándome a actualizar mis conocimientos y competencias de acuerdo a las exigencias de la Escuela del Siglo XXI. Con un profesorado formado en el Siglo XXI las posibilidades de aprender del alumnado se amplían considerablemente. La red nos ofrece formas de aprender que respetan los ritmos de aprendizaje, una mayor flexibilización, favorece la autonomía del alumno, un aprendizaje más activo y sobre todo, contenidos actualizados e ilimitados. Así pues, mi respuesta a la pregunta con la que he abierto la reflexión es sí, me formo, y me formo en y desde la red. Ese es el reto del Siglo XXI. Un placer compatir con todos mi reflexión. Saludos¡

martes, 12 de septiembre de 2017

PRESENTACIÓN: "MI PROFESORA ANA"

Como docente enredada, comparto la primera actividad del curso de Tutor en Red. Para ello, una alumna de mis clases de Psicología se ha atrevido a presentarme, mis intereses, mis virtudes y fortalezas, lo que me gusta, lo que no....